El duelo en personas con discapacidad intelectual

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El duelo en personas con discapacidad intelectual requiere una atención especial. ¿Cómo podemos ayudar a una persona discapacitada a superar su duelo?

El duelo en las personas con discapacidad intelectual es un acontecimiento que debe ser tratado con mucha delicadeza. Los padres de niños discapacitados a menudo tienen una pregunta persistente: ¿cómo reaccionará nuestro hijo cuando muramos?

En el artículo de hoy intentamos entender cómo se procesa. duelo en personas con discapacidad intelectual. ¿Qué podemos hacer para ayudarlos en un momento tan difícil de sus vidas?

El nacimiento de un niño con discapacidad intelectual genera un cierto impacto dentro de la familia. El acontecimiento fue vivido como inesperadamente extraño y abrumador. A medida que pasan los años, la necesidad de recursos y apoyo se hace cada vez más presente. De hecho, las familias a menudo no están preparadas para responder a las necesidades de un niño discapacitado.

Es normal que surjan diversas dudas sobre cómo gestionar diferentes aspectos de la vida diaria. La comunicación de malas noticias, especialmente, es uno de estos aspectos. Las preguntas más frecuentes son: ¿Qué pasará con nuestro hijo cuando ya no estemos aquí? ¿Cómo se tomará esta noticia? ¿Cómo se vive el duelo en personas con discapacidad intelectual?

Las diferentes etapas y tipos de duelo

La mayoría de los estudiosos coinciden en que el proceso de duelo implica varias fases. El duelo en las personas con discapacidad intelectual no es diferente: las personas con discapacidad también lo sufrirán enfrentar las mismas etapas de pérdida . Estos van desde el impacto inicial hasta la recuperación definitiva o la cronicidad del problema. Así es posible resumirlos en cuatro momentos diferentes:

    Impacto inicial: shock de perplejidad.Los principales síntomas son la negación, la incredulidad y el pánico ante la situación.
    Ira y culpa.Esta fase se caracteriza por ideas de autocastigo, sentimientos de ira, búsqueda de un culpable y tendencia al aislamiento.
    Desorganización del mundo, desesperación y cierre en uno mismo.Es una fase de resistencia hacia la vida normal que conduce a un sentimiento de debilidad y una marcada tendencia al aislamiento.
    Afirmación y aceptación de la realidad:la persona vuelve a la vida y recupera la esperanza. Incluso si hay fechas concretas (como un aniversario u otras fechas clave) que pueden hacer que el dolor resurja, la persona aún es capaz de afrontar la realidad. Esto sucede gracias a las fases previas en las que ocurrió. procesando la perdida .

Respecto a los tipos de duelo, es posible distinguir dos reacciones básicas : normal y patológico. Los elementos fundamentales que los distinguen son la intensidad, duración y nivel de influencia de los síntomas en la vida diaria.

Duelo con curso normal o patológico

El duelo normal se considera terminado cuando la persona llega a la última etapa del proceso. Es decir, cuando haya resuelto con éxito las etapas anteriores. De esta forma podrá recuperar la estabilidad emocional que le permita afrontar otros problemas. De lo contrario duelo patológico puede tomar dos formas:

    Complicado o no resuelto: cuando la persona se encuentra presa en alguna de las fases del proceso.Como resultado, experimenta la pérdida intensamente o, por el contrario, sin intensidad alguna, como si estuviera bajo anestesia.
    Duelo psiquiátrico:en el que se desencadenan síntomas compatibles con un posible diagnóstico de trastorno psiquiátrico.

El duelo en personas con discapacidad intelectual implica exactamente las mismas fases. El camino de recuperación incluye la transición del impacto inicial a la aceptación o cronicidad del problema.

Manejo del duelo en personas con discapacidad intelectual

Existen acciones específicas que promueven la orientación y gestión de la tristeza y la desesperación tras el duelo. Siguiendo algunos criterios es posible ayudar a canalizar estas emociones. nivel de discapacidad intelectual .

Uno de estos criterios denominado enfoque proactivo proporciona los siguientes modelos de acción:

    ¿Cuándo y cómo comunicar la noticia?Aunque puede resultar doloroso y difícil, es mejor dar la información lo antes posible. Lo ideal es hacerlo de forma sencilla con pocas palabras y utilizando un lenguaje fácil de entender.

Otras acciones útiles para ayudar a gestionar el duelo

    Ayuda a reconocer algunos síntomas.inherente al proceso de duelo que desaparecerá con el tiempo.
    Sugerir guardar algunos recuerdos (fotografías, cartas...).Puede resultar útil crear un álbum o una caja de recuerdos que permita revivir momentos concretos.
  • Cuando ocurre una muerte en la familia Es importante que las personas con discapacidad intelectual también participen en las ceremonias pertinentes. De esta forma podrán anticiparse a los acontecimientos que les afectarán de primera mano.
  • Asegurarse de que la persona con discapacidad intelectual Mantenga sus actividades diarias con normalidad.

Una de las principales preocupaciones de las familias con personas discapacitadas es su futuro cuando sus padres ya no estén. ¿Quién se hará cargo de ellos? ¿Se quedarán solos? Lamentablemente, estas son preguntas que nadie puede responder. Pero es posible anticipar algunas decisiones importantes para evitar traspasar la responsabilidad a otros.

La información inmediata sobre lo sucedido y la atención personalizada ayudan a gestionar el duelo en personas con discapacidad intelectual.

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