Efecto Matilda: mujeres, ciencia y discriminación

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¿Sabes cuántos premios Nobel se han otorgado a hombres en más de 120 años de historia? ¿Y cuántos recibieron las mujeres? La proporción es alarmante: 817 para hombres y sólo 47 para mujeres. El efecto Matilda surgió para reconocer la discriminación sexista en el ámbito científico.

Surgió para denunciar que las científicas reciben menos premios y recompensas que sus colegas masculinos a pesar de lograr los mismos resultados. Trabajar o incluso mejor. También resulta curioso que el origen de este término provenga del corolario masculino.

El origen del efecto Matilda es bíblico

Para comprender mejor el efecto Matilda conviene explicar el nacimiento de su análogo masculino: el efecto San Matteo (o efecto Mateo). Robert K. Merton el sociólogo que acuñó este término citó las palabras de San Mateo como referencia. En la parábola de los talentos el evangelista Mateo ofrece una lección que nos empuja a reflexionar.

Quitadle, pues, el talento y dadlo al que tiene diez talentos.Porque al que tiene, se le dará más, y le sobrará; pero al que no tiene, hasta lo que tiene le será quitado.

-Mateo 25:14-30 La Parábola de los Talentos-

El efecto San Mateo

El efecto San Matteo se refiere a la menor atención, consideración o reconocimiento que reciben las obras que no son creadas por profesionales de renombre. respeto

Intenta explicar porque las obras anónimas no son tan citadas como las de autores famosos aunque estos últimos pueden ser de peor calidad. joven otros prometedores que aún no se conocen. Quedan a la sombra de los grandes autores que ya gozan de fama y éxito.

Adaptación femenina a la ciencia: el efecto Matilda

El llamado efecto Matilda se originó en 1993 gracias a Margaret W. Rossiter. mujer comparado con el de los hombres.

Quería denunciar las situaciones en las que el descubrimientos y la investigación sobre las mujeres fue condenada al ostracismo por una simple cuestión de género y no de calidad. El crédito y el reconocimiento que merecen las científicas es menor que el que obtienen sus colegas masculinos.

En este sentido, la integración de la mujer en el ámbito científico se produjo de forma muy lenta.

¿Cómo se penaliza a las mujeres?

El beneficio que obtienen los hombres no se limita a las recompensas que reciben. Más allá de recompensas remuneración trabajos financiación o publicaciones Existen diversas variaciones en las que los hombres, simplemente por ser hombres, tienen ventaja.

Debido a esto, se han quedado atrás mentes brillantes de físicos, químicos, sociólogos o médicos. Vieron infravalorado su trabajo respecto al de los hombres abandonado en un cajón o despreciado sin explicación. Durante mucho tiempo se les ha negado el reconocimiento que merecían.

La sufragista que inspiró el efecto Matilda

Rossiter llamó a esta situación el efecto Matilda. honor de Activista, pensador, autor prolífico y pionero de sociología norteamericano

Entre sus múltiples iniciativas destaca aquella en la que apoyó a Victoria Woodhull, una de las primeras mujeres en presentarse a la presidencia de la Casa Blanca. Madre de familia numerosa, publicó numerosas obras denunciando la falta de libertad, reivindicando la igualdad de derechos para las mujeres.

Su trabajo la llevó a desempeñarse como presidenta de la casos donde las mujeres en su desarrollo profesional tienen que enfrentar estas injusticias.

Efecto Matilda: la verdad en el mundo actual

Los casos destacados por el efecto Matilda no se limitan sólo a siglos pasados. Hoy en día es bien conocida la injusta situación a la que están expuestas muchas mujeres en muchos ámbitos de la vida diaria. El trabajo es solo un ejemplo más de los contextos en los que se les discrimina.

Pongamos un ejemplo refiriéndonos a los premios Nobel, los premios más prestigiosos. La contribución de Lise Meitner y Rosalind Franklin fue decisiva. Respectivamente en cuanto al descubrimiento de la fisión nuclear y la estructura de doble hélice del ADN.

¿Adivina qué? Ninguno recibió el Premio Nobel. Sin embargo, sus colegas masculinos se vieron recompensados ​​al aprovechar ambos descubrimientos. De hecho el de Meitner es uno de los casos más ilustrativos de cómo los descubrimientos científicos realizados por mujeres se ven totalmente obstaculizados por la comisión de estos premios.

En este sentido te recomendamos leer el libro Historias y vidas de súper mujeres que han hecho Ciencia de Gabriella Greison. El trabajo publicado en noviembre de 2017 habla de todas las mujeres de mente libre, gran fuerza de voluntad, compromiso e inteligencia que han pasado a la historia y que pueden ser fuente de inspiración para cada una de nosotras. La parte oscura y a la vez brillante de la aventura de ciencia .

Los avances realizados son notables y esperamos que un día no muy lejano la igualdad de oportunidades se haga realidad. Lo cierto es que el camino a recorrer para que el progreso científico no sea una cuestión de género aún es largo. Como todos estaremos de acuerdo Se debe dar mayor importancia a lo que se hace y no a quién lo hace.

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