
Todos hemos tenido que lidiar con profesores que no disfrutaban de una educación saludable. manejo de emociones. Profesores en conflicto con estudiantes, profesores que carecieron de empatía o que castigaron sin razón. A veces incluso pueden llegar al punto de chocar con los estudiantes.
El gestión de las emociones de los profesores se trata de su capacidad para controlar las emociones. Es una habilidad que rara vez nos enseñan. Lamentablemente, en realidad se da mucha importancia a los conceptos pero no a su aplicación.
Cuando hablamos de falta de gestión emocional no pretendemos culpar a los profesores. A menudo hacen lo que pueden pero no tienen las herramientas adecuadas.
Del lado de los profesores
En muchos casos yo profesor están abrumados por la ansiedad por todos los problemas que enfrentan. Alumnos con situaciones familiares difíciles, padres que no asisten a reuniones exigentes o conflictivas… Es difícil encontrar el espacio adecuado para gestionar las emociones.
Por ejemplo, en muchas escuelas los incidentes de intimidación . ¿Quién prepara a los docentes para afrontar estas situaciones violentas? Pocos de ellos han tenido la oportunidad de aprender a gestionar las emociones en grupos en conflicto. Sin embargo, muchos han tenido esta experiencia.
Para gestionar la dimensión emocional de un grupo de estudiantes es necesario saber gestionar primero la propia. Cuando entra al aula el profesor no se transforma en una máquina. No deja sus emociones fuera de la puerta del aula. Las lecciones también se hacen de emociones como lo es el placer de enseñar.
Por otro lado Muchos alumnos abandonan la escuela precisamente porque el profesor ha agotado la alegría y el placer de enseñar. La influencia de los profesores es tal que afecta a los estudiantes de forma positiva o negativa. Por tanto, una correcta gestión de las emociones tiene consecuencias positivas para todo el grupo.

Gestionar las emociones de los profesores: habilidades básicas
Hay cinco habilidades básicas para ayudar a los profesores a gestionar las emociones. Para presentarlos hemos elegido la organización creada por Peter Salovey.

Una protección contra el estrés
Saber gestionar sus emociones permite a los docentes disfrutar de diferentes recursos para afrontar determinadas situaciones. En caso de estrés, las acciones implementadas pueden tener un impacto positivo en el aprendizaje de toda la clase. Esto se debe a que el docente es capaz de evitar trastornos provocados por el estrés o la ansiedad.
También aprendes a afrontar nuevos retos. Por ejemplo: una clase conflictiva, demasiado llena, falta de motivación para estudiar…
Vivimos en una sociedad en la que es necesario educación en valores . El alumno debe sentir al profesor cerca de él y saber que le comprende. Los profesores tienen una enorme influencia pero a veces no son conscientes de ello.
Es bien sabido que la profesión docente no es fácil. Las lecciones, los alumnos y la ansiedad de llegar a todas partes provocan una sensación de opresión. Pero recordemos que hasta hace unos años nosotros también estábamos sentados en esos pupitres. Y nosotros también pensábamos a veces: nadie me entiende.
En esa situación la mirada condescendiente del profesor no era de nuestro interés. En cambio, hubiera sido bueno que se hubiera acercado a nosotros al final de la lección para decirnos una palabra de consuelo o hacernos sentir especiales. Y sobre todo, saber que él no lo había olvidado cuando él también se sentaba en la escuela.