
Muy a menudo los hábitos se adquieren de forma inconsciente. Simplemente, poco a poco se vuelven mecánicos hasta que ya ni siquiera recordamos por qué pensamos de cierta manera o por qué siempre hacemos las cosas siguiendo el mismo patrón. Terminamos creyendo que esa es la única manera posible de pensar o de vivir y todo se vuelve tan obvio que ni siquiera nos paramos a pensarlo o cuestionarlo.
Lamentablemente, muy a menudo adquirimos hábitos a partir de personas o experiencias negativas. Nos acostumbramos a tener una nube negra sobre nosotros y al final los hechos nos dan la razón. Porque cuando vamos a buscarlo, aumentan las posibilidades de encontrar lo que temíamos.
Tu carácter es esencialmente la suma de tus actitudes; Está determinado por cómo te comportas habitualmente.
-Rick Warren-
De la misma manera que adquirimos ciertos hábitos de comportamiento y pensamiento que no nos llevan a ninguna parte. También podemos decidir aumentar nuestra conciencia sobre la forma en que actuamos y No es tan difícil y si lo hacemos podemos mejorar mucho nuestra calidad de vida.
¡A continuación te presentamos siete hábitos que debes abandonar si realmente quieres saborear las alegrías de la vida!
7 hábitos negativos que debes abandonar
1. Criticar: uno de los hábitos más destructivos
Mucha gente tiene tendencia a emitir juicios.
El crítica por el contrario es válida sólo cuando tiene como objetivo mejorar algo.

2. Esperar pasivamente a que suceda algo
Esto ocurre cuando tu respuesta al malestar no es la búsqueda de una solución sino más bien . Esperas que llegue el amor, que te ofrezcan un mejor trabajo o que algún médico encuentre por fin la cura para tu migraña.
En el fondo sueñas despierto que alguien te salvará. Te ves como alguien que no tiene los medios para resolver problemas o tomar un nuevo camino. Pero este hábito te llevará a pasar días sin tomar medidas, perdiendo un tiempo precioso que nunca recuperarás.
3.Haga de quejarse un estilo de vida
Quizás sin darte cuenta te hayas convencido de que el quejas son positivos. Crees que quejarte es una forma de demostrar tus esfuerzos o de hacer saber a los demás cuántas dificultades has enfrentado en la vida. .
Tal vez lo hagas en
4. Finge que el problema no te concierne
El escapismo es un hábito muy común sobre todo Quizás creas que esta actitud es sólo una manera de vivir más tranquilamente e incluso estés orgulloso de ello.
Lo que es seguro, sin embargo, es que Los verdaderos problemas de la vida no pueden ser ignorados. . No importa qué tan rápido huyas, tarde o temprano te alcanzarán. Si continúas ignorándolos sólo los alimentarás y los harás crecer. Ningún problema grave se soluciona solo y esconder la cabeza bajo tierra lo complica

5. Consumir consumir y consumir…
Convertirse en esclavo del consumismo es un hábito que sin duda te llevará a la infelicidad. Puedes llegar a creer que tener un celular de última generación te hará sentir la persona más afortunada de la Tierra. Y tal vez realmente sea así... durante unas horas. Después volverás a bajar a la tierra y tu mirada se posará en el siguiente capricho.
Asociar el bienestar a objetos materiales sólo sirve para proyectar sobre ellos tu vacío interior. A todo el mundo le gusta ir de compras y darse un capricho de vez en cuando. Pero cuando comprar se convierte en la única forma de llegar felicidad y sobre todo se convierte en hábito significa que hemos tomado un camino equivocado. Un camino que sólo aumentará la sensación de vacío que sentimos.
6. Quédate siempre en casa
Cuando no nos sentimos bien tendemos a volvernos pasivos y no queremos movernos de donde estamos. Generalmente Pero cuando seguimos viviendo de esta manera y lo convertimos en un hábito, es hora de preguntarnos qué está pasando.
El problema no es tanto que te quedes encerrado. La verdadera dificultad radica en que esta forma de actuar construye un estilo de vida que gira en torno al aislamiento. Y el aislamiento, a su vez, alimenta la condición depresiva y la sensación de volverse cada vez más frágiles y vulnerables.

7. Rechazar la novedad y el cambio
Ten hábitos también Si siempre haces las mismas cosas, tus pensamientos, sentimientos y percepciones seguramente seguirán siendo los mismos. . Es como si hubieras metido lo que hay dentro de ti para siempre.
I cambios siempre son positivos porque de una forma u otra te sacan de tu zona de confort. Y esto te obliga a activar tu mundo interior para poder adaptarte a lo nuevo. Esta nueva condición nos hace sentir vivos y nos muestra que hay muchas otras actividades interesantes además de las cuatro a las que estás acostumbrado.