
La traición es una de las experiencias más dolorosas que uno puede tener. No importa si es la pareja de un amigo o un familiar. Cualquiera que traicione nuestra confianza abre una herida que, si es que alguna vez lo hace, tendrá dificultades para sanar. Por supuesto, la herida de la traición es aún más dolorosa cuando la inflige una persona en la que confiamos ciegamente.
Bien no todos decepciones puede calificarse como traición. De hecho, el ser humano no puede evitar decepcionar a los demás una o más veces. A veces simplemente no estamos a la altura de las circunstancias y terminamos decepcionando a las personas que amamos.
Hace trampa más a menudo
-François de La Rochefoucauld –
Las traiciones que realmente marcan y duelen son aquellas que se hacen deliberadamente y con total conciencia. y movido por razones egoístas. Los de aquellos que nos habían asegurado una cosa y que en el momento de la verdad se comportaron de otra manera, conscientes de faltar a su palabra.
Los diferentes tipos de traición
Cuando hablamos de este tema tendemos a pensar inmediatamente en la traición en el amor. Sin embargo Hay diferentes tipos de traición. Desde el que se dirige hacia uno mismo hasta el que es fruto de una verdadera conspiración conscientemente tramada y ejecutada contra alguien.

Cualquier tipo de traición tiene dos aspectos en común: la ruptura con lo previamente establecido implícita o explícitamente y romper la confianza.
Se traicionan acuerdos y expectativas, ilusiones y promesas. Se traiciona a sí mismo con palabras y hechos.
La persona traicionada experimenta el sabor más amargo del engaño. Ella se siente burlada y minimizada. . Sus sentimientos, sus pensamientos y sus expectativas han sido pisoteados. Ella fue transformada en objeto para lograr un fin. Así es: fue usado y manipulado por algo de lo que no era consciente. Por eso la traición duele tanto y deja una fuerte huella en quien ha sido víctima.
Curando una herida de traición
El efecto más nocivo de una traición viene dado por el profundo sentimiento de desconfianza que surge en la persona traicionada que debido a esta experiencia podría perder la confianza hacia el mundo entero. Una herida por traición a veces tiene un impacto muy fuerte que no puede sanar por sí sola. Por eso se vuelve esencial encontrar los recursos adecuados para superar la situación. Estas son algunas estrategias para lograrlo:

Aunque una herida de traición sana lentamente, no necesariamente tiene por qué generar un trauma eterno. El primer deber de la persona traicionada es recuperar el equilibrio para seguir adelante. Debemos evitar que los errores ajenos se conviertan en una marca que nos marque para el resto de nuestra vida.