Toma el control de tu vida

Tiempo De Lectura ~8 Mínimo

¿Alguna vez has leído la metamorfosis de Kafka? El protagonista se despierta una mañana y descubre que se ha transformado en una cucaracha. A todos nos gustaría despertarnos una mañana y descubrir que algo ha cambiado y que todos nuestros problemas han sido solucionados. ¿No sería eso ideal? Sin embargo, este deseo no puede convertirse mágicamente en realidad. Lo mejor que puedes hacer es tomar las riendas de nuestra vida.

Un día todo cambiará y mejorará, verás que todo saldrá bien… ¿cuántas veces nos hemos repetido frases como ésta? Por alguna razón, cuando nuestra vida no va como queremos tendemos a pensar que un agente externo mejorará las cosas. De repente algo cambiará el rumbo de los acontecimientos y todo será mejor.

Parece más fácil pensar que todos los problemas pueden resolverse solos como por arte de magia. Sin embargo, en realidad no funciona así, así que te contaremos un secreto: depende de ti. Debe tomar las riendas de la vida de uno.

La felicidad no es algo listo para usar. Proviene de nuestras acciones.

-Dalai Lama-

Un pequeño gran secreto

Otro pequeño gran secreto es que los problemas de la vida no se resuelve sola. Tomar el control de tu vida requiere compromiso. ¿Quién no ha conocido a personas que quieren terminar una relación o que quieren dejar atrás una situación incómoda pero no pueden tomar una decisión? Quién no conoce a personas que continuamente se quejan de lo mal que les va todo en la vida pero que son incapaces de responsabilizarse de ello. En la novela de kafka Todo parece suceder por pura magia, pero en realidad no es así.

Cuando estas situaciones empiezan a surgir con cierta frecuencia podríamos darnos un capricho victimismo por qué la tendencia es pensar que somos víctima de todo lo que sucede. No somos conscientes del poder que tenemos en nuestras manos y culpamos a factores externos y a nuestra mala suerte. Sin duda es una de las actitudes más equivocadas que podríamos adoptar.

Si continuamente te quejas con frases como que toda mala suerte me pasa a mí o si tiendes a repetir este tipo de expresiones como si fueran una mantra realmente empezarás a creerlo aunque esto no sea así y os convertiréis en espectadores de vuestra vida; incapaz de comprender y querer. Todos pasamos por situaciones más o menos difíciles, a veces nos suceden desgracias una tras otra o por el contrario cosas positivas una tras otra.

Gran parte de nuestra vida depende de la actitud que decidamos tener ante ella incluso cuando las cosas van mal. Algunas personas siempre muestran una sonrisa con dientes ante la adversidad, otras pronuncian frases negativas y hacen gestos que muestran hostilidad hacia ellos mismos, los demás y todo lo que les rodea.

Tú también puedes elegir cómo reaccionar. Pues si: tienes el poder de elegir vivir en paz pase lo que pase; o mejor dicho tienes el poder de vivir con una dosis más o menos alta de ansiedad y frustración.

Que comience el cambio

En la filosofía budista existe un término cuya descripción podría ocupar cientos de páginas pero que en pocas palabras no es otra cosa que la Ley de causa y efecto o en una palabra la Karma . Según el karma el que siembra viento, cosecha tormenta y el que bien siembra recogerá los frutos.

¿Y qué tiene en común el karma con los cambios en nuestra vida? Muy sencillo. Todo aquel que quiera un cambio debe empezar a actuar. Ninguna fuerza externa vendrá a rescatarlos. Toda la energía que utilizas para soñar con una vida mejor podrás invertirla en el inicio de un nuevo camino para tomar las riendas de tu vida. Porque el nuevo camino no depende de nada ni de nadie excepto de vosotros mismos. Si comienzas a plantar las semillas del cambio cosecharás precisamente eso.

El cambio es un trabajo duro y requiere esfuerzo. algo que no todo el mundo está dispuesto a hacer. Por lo tanto, no podemos esperar que nuestras vidas cambien sin cambiar nada en nuestra vida diaria. Desde hace varios años actuamos de una determinada manera y eso nos ha llevado a adoptar modelos de conducta que con el tiempo se han convertido en parte integral de nosotros mismos. ¿Qué queremos decir con esto? Que tendemos a solucionar nuestros problemas siempre siguiendo el mismo patrón mental aunque muchas veces nos damos cuenta de que no es el camino correcto para encontrar una solución.

¿Alguna vez has tenido un compañero de clase que, a pesar de pasar tardes enteras leyendo libros, fracasó? La mayoría de nosotros conocemos personas que siempre utilizan el mismo esquema de solución aunque los resultados no sean positivos. Sus creencias se basan en el hecho de que no se han esforzado lo suficiente pero el problema está en la raíz. Si a pesar de haber estudiado fracasas, ¿cuál podría ser el problema sino el método de estudio? Así es Esto es en lo que debemos trabajar: cambiar el enfoque y el método a través del cual queremos lograr nuestros resultados.

Tomar las riendas de nuestra vida en nuestras propias manos requiere acción, esfuerzo y conciencia de la realidad.

Los primeros pasos para tomar el control de tu vida

El primer paso a dar para tomar el control de tu vida es Analizar lo que queremos cambiar. . ¿Qué aspectos de nuestra vida nos gustaría mejorar? Es fundamental ser honestos con nosotros mismos.

tendemos a autoingannarci decir mentiras para no reconocer nuestros errores y no centrarnos en lo que hay que cambiar. El error está aquí. La sinceridad es importante, pero surge de trabajar en nosotros mismos, por lo que no necesitamos mostrarles a los demás que estamos trabajando en nosotros mismos.

El segundo paso es mira lo que hemos hecho hasta la fecha por qué ¿Cuáles fueron nuestras estrategias? ¿Por qué siempre obtenemos los mismos resultados? ¿Por qué no se han producido los cambios que queríamos ver? Necesitamos analizar la situación y ver si tendemos a repetir siempre los mismos patrones porque si es así es hora de cambiarlos.

El tercer paso para tomar las riendas de tu vida -y que es casi más importante que los anteriores- es superar el miedo . El miedo es una emoción instintiva necesaria porque nos salva la vida en momentos de peligro; pero cuando se hace cargo se convierte en un problema.

Esta emoción tiende a paralizarnos y dejarnos atrapados en nuestra zona de confort. Preferimos seguir sintiéndonos mal ante el pensamiento de un nuevo desafío por miedo a lo que pueda pasar o a abandonar algunos hábitos o personas que forman parte de nuestra vida.

¿Qué te parece si en lugar de sentarte en el sofá esperando que algo cambie, te levantaras y comenzaras a cambiar realmente tu vida? Confía en ti mismo y puedes estar seguro de que empezarás a ver resultados que nunca esperabas. un viaje de

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