
El estrés es uno de los grandes males de nuestro tiempo especialmente en los países más desarrollados . No es fácil mantener la calma en un mundo que corre a velocidades vertiginosas, sobre todo gracias a las nuevas tecnologías. Tampoco es fácil tolerar los altos niveles de ruido y hostilidad en las grandes ciudades. Aunque muchas personas han desarrollado una gran capacidad de adaptación, gestionar el estrés sigue siendo una tarea difícil.
A medio y largo plazo El estrés causa graves daños físicos y mentales . Muchos trastornos físicos son el resultado de este estado psicofísico insalubre. Asimismo, el estrés nos bloquea, no nos permite pensar con claridad y puede repercutir en nuestras relaciones.
Si no es un caso demasiado grave que requiera la intervención de un psicólogo, es posible aprender a gestionar el estrés a través de algunos sencillos trucos. A veces sólo hace falta hacer una pausa y poner en práctica los hábitos saludables que te presentamos a continuación.
Relajarse. La tierra que ha descansado produce una cosecha abundante.
-Ovidio-

Trucos para gestionar el estrés
1. Identificar cuándo surge el estrés
Reconocer el estrés no es tan fácil como podría parecer a primera vista. Muchas veces sólo podemos identificarlo cuando alcanza niveles altos . El estrés se manifiesta a nivel físico y emocional . Puede tener una intensidad creciente o permanecer latente.
Una indicación física de estrés es la tensión muscular especialmente en la zona de la mandíbula, el cuello y los hombros. También hay cierta tensión en el rostro y muchas veces tendemos a fruncir los labios. Emocionalmente sentimos una sensación de irritación mezclada con ansiedad. Estos sentimientos nos dicen que es hora de tomar un descanso.
2. Practica técnicas de respiración
La respiración es una poderosa herramienta al alcance de todos y fácil de utilizar en cualquier momento y situación para gestionar el estrés. . Es un medio extraordinario para recuperar la serenidad. Se ha demostrado que un aliento Lento y regular activa el nervio vago responsable de moderar la respuesta al estrés.
Simplemente colóquese en la posición más cómoda posible y comience a respirar muy profundamente. Intente concentrarse en la sensación de que sus pulmones se llenan de aire. Luego exhala muy lentamente. En tan sólo dos o tres minutos habrás reducido tus niveles de estrés.

3. Desviar la atención
El estrés está asociado con una respuesta de lucha o huida. Debido a esto Cuando nos encontramos bajo estrés nuestra atención se concentra lo más posible en el objeto que provocó el estado de tensión. . Si continúa concentrándose en la fuente de la ansiedad, la sensación de estrés solo aumentará.
Por este motivo es importante que hagas un esfuerzo por desviar tu atención. Mira un objeto que esté cerca de ti. Intenta describirlo mentalmente con el mayor detalle posible. . Luego repite el mismo ejercicio con otros dos objetos. Este sencillo truco te ayudará a gestionar el estrés regulando tus impulsos y ampliando inmediatamente tu panorama emocional.
4. Mira una imagen relajante
Las imágenes transmiten sensaciones que quedan impresas en el observador. . Por este motivo es bueno tener siempre a mano una fotografía o imagen que nos aporte sensación de calma. Las más adecuadas son las imágenes de paisajes sobre todo si se trata de lugares aislados con un clima frío muy verde o mucha agua.
Cuando te sientas muy estresado mirar estas imágenes te ayudará a relajarte . También es una forma útil de centrar la atención en algo agradable que ayuda a reducir la sensación de ansiedad.

5. Reinterpretar la experiencia
A veces saber que estamos estresados aumenta el estrés que sentimos. Nos damos cuenta de que estamos angustiados y queremos deshacernos de ese sentimiento lo antes posible. Pero como no siempre es fácil, esta conciencia, en lugar de calmarnos, nos preocupa aún más. Después de haber identificado y aceptado el estrés, es importante implementar una serie de mecanismos útiles para reducirlo. No es necesario aplicar estrategias complicadas y frustrante que no hará más que elevarlo.
Intenta reconocer todas las formas en que el estrés se manifiesta en ti . ¿En qué estado se encuentra tu cuerpo? ¿Qué posición ha adoptado? ¿Cómo late tu corazón? ¿Qué tipo de pensamientos se producen en tu mente? Esta y otras preguntas similares te ayudarán a reinterpretar lo que sientes. De esta forma la sensación de tensión irá desapareciendo poco a poco.
6. Adopta una posición corporal antiestrés
Debes saber que existen posiciones corporales estresantes y otras antiestrés . Las primeras son, por ejemplo, sentarse con las piernas cruzadas o mover una o ambas piernas a un ritmo rápido y constante. La espalda estará más curvada y los músculos faciales estarán muy tensos.
De lo contrario ponerse de pie con la espalda recta y hacer muecas con la cara le ayudará a controlar el estrés . Es una posición que nos da confianza y seguridad. Según un estudio publicado en Psicología de la Salud Esta posición también inhibe la producción de cortisol .

7. Haz un ejercicio sencillo con las manos.
Se ha demostrado que y cerrar con fuerza los puños de ambas manos y luego abrirlos es un ejercicio que ayuda a reducir el estrés. Este es un gesto agresivo y por ello ayuda a liberar tensiones en momentos de fuerte ansiedad.
Todos estos pequeños trucos pueden resultar muy eficaces para gestionar el estrés. Es normal sentirnos un poco tensos en un mundo como el actual, sobre todo si vivimos en una gran ciudad. Lo importante es no dejar que el estrés nos invada y aplicar las herramientas necesarias para controlarlo cuando aparezca.