Funciones ejecutivas: habilidades mentales

Tiempo De Lectura ~7 Mínimo
Las funciones ejecutivas son procesos cognitivos complejos. Son el conjunto de todas aquellas actividades mentales que producimos para relacionarnos con nuestro entorno.

Las funciones ejecutivas son procesos cognitivos complejos. Son el conjunto de todas aquellas actividades mentales que producimos para relacionarnos con nuestro entorno; trabajar para crear, priorizar unas actividades sobre otras o incluso encontrar la motivación adecuada.

Es una especie de secuencia automática de procesos que llevamos a cabo todos los días sin siquiera darnos cuenta.

A primera vista puede parecer difícil de entender. A menudo escuchamos que el cerebro funciona como una computadora o que utiliza casi los mismos mecanismos que un procesador mecánico. Pues podemos decir que funciona mucho mejor. El funciones ejecutivas son habilidades increíblemente sofisticadas mediante las cuales regulamos nuestra conducta y logramos objetivos.

Algo que supera con creces cualquier forma de tecnología.

Los grandes acontecimientos del mundo tienen lugar en el cerebro.

-Óscar Wilde-

Tomemos un ejemplo. Vamos a dormir con un libro para leer. Mientras buscamos el capítulo que terminamos de leer anoche, pensamos en lo que tenemos que hacer mañana por la mañana. Nos fijamos objetivos, decidimos qué es mejor posponer y qué priorizar.

Pensamos en nuestras metas para el día siguiente y luego nos concentramos en nuestra lectura, planeando apagar las luces dentro de una hora para ir a la escuela. dormir .

Gracias a esta sencilla escena te hemos explicado cómo cerebro puede completar una cantidad infinita de procesos en solo una fracción de tiempo. Realmente en unos segundos. Participamos, priorizamos, planificamos, hacemos seguimiento y nos centramos en determinados objetivos.

Funciones ejecutivas y lóbulo frontal.

Los seres humanos no vienen al mundo con todas las funciones ejecutivas listas para ser utilizadas. Puede resultar curioso, por ejemplo, saber que muchos de estos procesos adquieren su plena funcionalidad alrededor de los 25 años. ¿El motivo? Estas capacidades cognitivas se localizan sobre todo en las estructuras prefrontales y son las últimas en desarrollarse.

El primer neurólogo que habló de estas funciones y del sistema ejecutivo fue Alejandro Luria . También hay que subrayar que estos procesos constituyen un elemento muy reciente desde el punto de vista filogenético.

Son considerados el aspecto más novedoso en el marco de nuestra evolución como especie; esto a su vez está asociado a dos etapas exactas: el desarrollo del lenguaje y el desarrollo de los lóbulos frontales. Estos hechos representaron una revolución total.

A partir de ese momento nuestros grupos sociales empezaron a definirse mejor, apareció la cultura, el control del entorno y toda una serie de avances que nos han convertido en quienes somos ahora.

Sin embargo, es importante señalar un aspecto esencial. Aunque está escrito en nuestro código genético que estos procesos se van perfeccionando a medida que maduramos (suele aparecer entre los 8 y 12 meses junto con el desarrollo del lenguaje del recién nacido) la plena adquisición de funciones ejecutivas depende de varios aspectos.

¿Qué influye en el desarrollo de las funciones ejecutivas?

A partir de los dos años, el tipo de interacción que recibimos y la calidad de esta se vuelven fundamentales. Experiencias estresantes o una relación inestable dificultan el adecuado desarrollo de estas funciones.

    Uno de los principales expertos en el cerebro ejecutivo es Elkhonon Goldberg. La sinfonía del cerebro Las funciones ejecutivas se encuentran en el lóbulo frontal. En otras palabras, el área de nuestra cultura y nuestras interacciones sociales.
  • Si un niño no disfruta de un vínculo significativo con sus padres o no recibe educación, difícilmente desarrollará o hará un uso eficaz de estos refinados procesos cognitivos.
  • Por otra parte es importante subrayar que Las funciones ejecutivas son visibles en situaciones inestables debido a trastornos como dislexia, déficit de atención con o sin hiperactividad ; o incluso en casos de discalculia, esquizofrenia o cualquier daño cerebral.

Ahora la buena noticia es que estas funciones cognitivas se pueden estimular. Si no hay problemas neurológicos graves. Todos podemos afinar los engranajes de las funciones ejecutivas.

¿Qué funciones ejecutivas tenemos?

Los animales también desarrollan funciones ejecutivas. necesidades de estos instintos.

La corteza prefrontal es una de las más recientes desde el punto de vista filogenético y es la última en madurar en la ontogenia. Nuestras funciones más refinadas residen precisamente en él; los que debemos entrenar todos los días.

-K. Goldberg-

En los humanos este aspecto es más sofisticado. No actuamos sólo para satisfacer necesidades. Mucho más allá de los instintos, estamos definidos por metas, deberes, relaciones sociales, cultura y redes sociales.

El entorno del que formamos parte es tan complejo que requiere de un cerebro capaz de adaptarse a ese caleidoscopio de estímulos internos y externos. Aquí es donde entran en juego las funciones ejecutivas.

Estas funciones son las siguientes:

  • Planificación: Generar una secuencia de ideas para lograr un objetivo.
  • Razonamiento: comparar excluir elegir analizar generar procedimientos heurísticos, etc.
  • Controlar y gestionar los tiempos: monitorizar el tiempo a dedicar a cada tarea; sabemos cuándo hemos superado ese tiempo objetivo y cuándo debemos invertir más horas en algo.
  • Organizar y estructurar la información para que tenga significado y propósito.
  • Inhibición: es la capacidad de reprimir y controlar nuestros instintos o impulsos para adaptar nuestra conducta.

Además…

    Concentración y mantenimiento de la atención.
  • Supervisión y control de nuestras tareas, objetivos o deseos.
  • Memoria de trabajo. Almacenar información a la que se pueda acceder más tarde; es una de las funciones ejecutivas más importantes.
  • Flexibilidad. La capacidad de cambiar nuestro objeto de interés; estar abierto a otras ideas y aprender de ellas.

El cerebro ejecutivo es sin duda el mayor regalo que nos ha dado nuestra evolución. Sin embargo, hay un matiz que no podemos pasar por alto: Las funciones ejecutivas pierden funcionalidad a medida que envejecemos. Por eso nunca está de más recordar lo que escuchamos a menudo: es importante no dejar pasar un solo día sin aprender algo nuevo.

No dejamos pasar un solo momento sin cultivar la curiosidad, la capacidad crítica o una conversación de calidad con nuestra gente. amigos o familiares. Todos estos aspectos son alimento para nuestro cerebro; energía para aquellos procesos cognitivos que pueden resistir el paso del tiempo.

Entradas Populares