Escritura terapéutica: 5 ejercicios sencillos

Tiempo De Lectura ~6 Mínimo

Cualquier persona pasa por fases de fuerte angustia y ansiedad. Ningún ser humano está exento de problemas y en ocasiones nos encontramos cargando enormes cargas sobre nuestros hombros. Los ejercicios de escritura terapéutica son una forma fantástica de afrontar nuestros sentimientos dañinos y dolorosos que, escuchados, parecerán insignificantes.

Durante siglos y siglos, la pluma y la tinta se han revelado como mucho más que simples herramientas. Su tarea no es sólo tomar notas o escribir ensayos: son el vehículo que da rienda suelta a nuestras emociones, nos permite expresarnos sin miedo y moldea nuestros sentimientos . ¿No es leer la mejor (y más saludable) actividad para escapar? Nos transporta a mundos ocultos donde podemos estar a solas con nosotros mismos. ¿Y la función de la escritura? Ciertamente no puede estar muy lejos.

En la década de 1960, el psicólogo estadounidense Ira Progoff estableció por primera vez el Método del Diario Intensivo que se basaba precisamente en escribir un diario. Desde entonces Numerosos estudios avalan la utilidad de esta práctica. que se ha vuelto cada vez más popular. Basta pensar en la importancia de los ejercicios de escritura terapéutica y su función fundamental, el hecho de que son fáciles y se pueden realizar en cualquier lugar; además, sea cual sea el problema de base, cualquiera puede llevarlo a cabo. Conozcámoslos un poco mejor.

5 ejercicios de escritura terapéutica

Para empezar, todo lo que necesitas es un bolígrafo y una hoja de papel. Coloquémonos en un lugar donde nos sintamos relajados y cómodos, posiblemente alejados del ruido. Si lo preferimos podemos añadir un toque de musica ligera para armonizar el ambiente.

Las velas aromáticas y los aromas también pueden mejorar el medio ambiente. Asegurémonos de encontrar la tranquilidad pero sobre todo de estar solos.

El diario de las cosas positivas

Mucha gente escribe un diario durante la infancia. Lo utilizan para anotar anécdotas curiosas o cosas interesantes que han sucedido pero esto no quiere decir que sólo se transcriban noticias alegres. En nuestro caso el diario debe servir sólo para anotar todas las experiencias positivas del día .

No, no es imposible. Tomémoslo como un desafío: desde que nos levantamos por la mañana prestamos atención a las cosas positivas que vemos a nuestro alrededor. Escribámoslos por la noche y volvamos a leerlos antes de irnos a dormir. Puede resultar sorprendente cómo la vida parece menos gris de lo que parece.

Pon tus ideas en orden

Cogemos el bolígrafo y durante media hora escribimos todo lo que se nos pasa por la cabeza. También pueden ser oraciones sin sentido o sin relación. nosotros también podemos dibujar Haga listas de lo que le viene a la mente o anote nombres aleatorios.

Aunque parezca una tontería, este ejercicio sirve para poner en orden tus ideas e identificar tus sentimientos más íntimos. Es una excelente manera de conocerte un poco más a ti mismo y arrojar luz sobre tu psique. .

-Alejandra Pizarnik-

Respiradero

Si algo nos hace sentir mal, escribámoslo. Imaginamos que es una carta dirigida a la fuente de nuestro descontento. Un arrebato. Expresamos todo lo que pensamos: nuestro dolor, nuestro miedo, lo nuestro. enojo . Inmediatamente sentiremos una gran sensación de liberación y una mayor ligereza una vez completado.

Una vez terminada la redacción podemos decidir si quemar la carta o entregársela a la persona a quien se la dirigimos. Sólo nosotros sabremos si es una buena idea o no: podríamos quitarnos un peso de encima pero también desencadenar problemas mayores. Siempre pensamos en las consecuencias antes de actuar.

dibujando sueños

Utilizamos la escritura terapéutica para escribir todos nuestros objetivos en una hoja de papel. Puede que haya muchos que sean imposibles de visualizar ni siquiera en nuestra cabeza. Pensémoslo un momento y preguntémonos, ¿realmente son imposibles de conseguir? ¿No es sólo el miedo al fracaso? ¿Existe alguna alternativa más realista?

Cualesquiera que sean nuestras decisiones, sólo nosotros sabemos hasta dónde estamos dispuestos a llegar. Nadie nos juzgará si fallamos y no debería importarnos si lo hacemos. Diseñemos la vida que queremos, visualicémosla y motivémonos. Démonos la fuerza para seguir luchando por lo que creemos porque es mucho mejor intentarlo y caer que quedarse en la duda para siempre.

Una carta para los días oscuros

Hay días que todo parece negro. La más pequeña estupidez nos hace enojarse Discutimos con todo el mundo y todos creen que empezamos con el pie izquierdo. Para todos estos momentos negativos asegurémonos de tener una carta escondida en la mesita de noche o en un lugar seguro: la carta de los días oscuros.

En primer lugar tendremos que identificar un día en el que nos sentimos especialmente felices para poder escribirnos una carta. Nos decimos a nosotros mismos lo orgullosos que estamos de nosotros mismos. con todas las cosas positivas que se te ocurran. De esta manera, cuando lleguen los días malos, tendremos una buena dosis de energía positiva de la que aprovechar.

Los ejercicios de escritura terapéutica son de gran ayuda, especialmente en momentos en los que no lo estamos haciendo muy bien o necesitamos un poco más de confianza. Nos enseñan a ordenar nuestros pensamientos y a reciclar los sentimientos: es decir, constituyen un apoyo emocional que muchas veces somos incapaces de encontrar de otros modos.

Entradas Populares