
El poeta romántico dijo una vez Gustavo Adolfo Becquer Nuestro estado de ánimo está marcado por el ruido del cambio y la transformación. algo que ocurre en todos los ámbitos incluido el familiar.
Una de las transformaciones más habituales dentro de la evolución natural de la dinámica familiar es la emancipación de los hijos . Muchos padres viven esta separación de sus hijos con la alegría de poder presenciar un paso importante para todos y con la esperanza de tener tiempo para lo que tuvieron que dejar de lado.
Sin embargo, esta alegría suele verse contrarrestada por el sentimiento de tristeza que surge al saber que están lejos de casa y al comprender que probablemente nunca regresarán. Es esta última sensación la que de forma intensa y con el tiempo da lugar al síndrome del nido vacío.
porque aparece
Cuando un niño, especialmente el más pequeño, se marcha de casa, los padres sufren un profundo vacío . De esta manera es algo socialmente aceptado que un niño comience a formar una familia La propia voluntad marcará el estado de ánimo de los que se quedan atrás.

¿Dejar atrás? No es así. Un niño que sale de casa no deja a nadie atrás. Simplemente sigue su camino y cambia de lugar donde vive pero sus padres siempre seguirán siendo una parte fundamental de su vida. Sin embargo Ver a su hijo abandonar la unidad familiar para formar la suya propia puede angustiar a los padres . Este caso suele ser especialmente doloroso para las madres que ven a sus hijos alejarse de sus brazos.
Según la psicología de la salud, se trata de situaciones que pueden perjudicar mucho a los padres. En el caso de las madres que han volcado todo el sentido de su vida en el cuidado de sus hijos, se ven ante un gran cambio ya que el niño que era su razón de ser ya no está. Sus cuidados ya no son necesarios, lo que genera en ellos un profundo sentimiento de vacío.
Un estado de ánimo en el que predomina la soledad y el vacío.
Al final Podemos considerar el síndrome del nido vacío como un ruido social que marca el estado de ánimo de determinadas personas. . Y estas personas son la base de una sociedad como la nuestra, fuertemente arraigada en la familia.
Después de todo, ¿qué es una sociedad basada en la familia sino su constante creación y evolución? Un día se fue un hijo hogar para formar tu propia unidad familiar. Se trata por tanto de dos familias que han cambiado de estructura, una nueva y otra transformadora. Un hecho natural y enteramente social.
Sin embargo una situación que debería parecer normal a simple vista puede generar dolor, frustración y soledad . Un ruido que provoca sufrimiento a algunos familiares cuyo estado de ánimo se debilita de forma alarmante.

Si un niño sale de casa y sentimos que con él se van los colores de nuestra vida y las ganas de disfrutarla, quizás nos esté invadiendo el síndrome del nido vacío o incluso
- Te sientes inútil y experimentas un profundo sentimiento de soledad.
- Sientes una enorme nostalgia por tiempos pasados y vives con recuerdos.
- La tristeza es la emoción más frecuente y predominante en tu estado de ánimo.
- Las tareas diarias que antes hacías con ganas ahora requieren esfuerzo y te sientes muy desmotivado.
- La fatiga y la ansiedad se han apoderado de tu mente.
- Con tu pareja tienes
Lidiando con el nido vacío
Está claro que la mudanza de un niño ha cambiado tu estado de ánimo . Ahora te encuentras en la necesidad de reconstruir el significado de tu figura en la familia. Durante años has vivido al servicio de tus hijos, has dedicado mucho tiempo a su desarrollo y
Es importante que la mudanza de tus hijos se convierta en una oportunidad y al menos en parte que tú lo veas así. De repente tienes más tiempo para ti y quizás no sabes cómo gastarlo pero descubrirlo puede ser una tarea fascinante. Una buena opción es desarrollar nuevos comportamientos y habilidades, así como enriquecer un círculo social erosionado por la dedicación a otras prioridades.

Al principio estos nuevos comportamientos y habilidades estarán encaminados a superar los síndrome del nido vacío. Lo que queremos decir es que se recomienda desarrollar habilidades para reducir el ruido que surge de las emociones negativas.
Los padres que han mantenido su relación de pareja también tendrán que aceptar el desafío de reconsiderar su matrimonio y afrontar juntos la nueva situación. Para ello es importante la comunicación y la expresión de las emociones y si antes hablábamos de una nueva gestión individual del tiempo, en este caso también hablamos de una nueva gestión compartida del tiempo.
en este momento retomar viejos pasatiempos descubrir nuevas actividades buscar amigos con quienes charlar son actividades que pueden hacer como amortiguador mientras encontramos otros nuevos que nos motiven. Por otro lado, no es negativo compartir y expresar este ruido. No hay nada de malo en confesar nuestro sufrimiento, pero sólo si no culpamos de este sentimiento a nuestros hijos. Recordemos que somos responsables de nuestras emociones.