
La envidia es considerada uno de los siete pecados capitales y suele desaparecer. crítica destructivo hacia los envidiados. Devastadora para quien la sufre y para quienes se ven involucrados en ella, esta emoción es tan común como dañina y suele ir acompañada de declaraciones superficiales y superficiales.
La envidia de alguien necesita tiempo y concentración para ser descubierta. dado que no es un sentimiento normalmente aprobado por la sociedad (en ese caso podemos hablar de envidia sana, entendida sin embargo como sinónimo de admiración). Por eso, quienes lo experimentan actúan en silencio, creciendo con el paso del tiempo y llevando a las personas a alegrarse de las desgracias ajenas.
A veces, sin embargo, se manifiesta abiertamente en forma de reproches o aprecios que no siempre son recibidos por la persona envidiada. Esto se debe a que la envidia a menudo se esconde detrás de formas confusas de reproches y críticas destructivas.
La envidia surge del deseo.
La envidia surge cuando quieres algo que no tienes y cuando te resientes por los éxitos de los demás.
Todo lo que hago así como todo eso.
-Jorge Bucay-
Esta molesta sensación suele generarse por dos tendencias propias del ser humano: querer lo que no se puede tener y comparar continuamente a los demás. En realidad, la envidia surge de la codicia y empuja a la persona envidiosa a la falta de empatía.
Además, las reacciones negativas que la persona envidiosa produce en su interior suelen derivar en aislamiento o dificultad para relacionarse. En definitiva para la persona envidiosa es muy dificil
Envidia: uno de los peores sentimientos
Para empeorar la situación, es bueno saber que Una vez que ha surgido la envidia, se mezcla con muchos otros sentimientos contradictorios: admiración frustración indignación enfermedad, etc. Generalmente
Por estas razones podemos decir con seguridad que la envidia es uno de los sentimientos más venenosos. Sentimos envidia del prestigio.

Se trata de críticas repetitivas sin otro propósito específico que el de alimentar la complacencia, la mayoría de las veces haciendo sentir mal a quien las recibe. La envidia puede hacer uso de armas como la difamación, el insulto o mentir mostrando la incapacidad del individuo para aceptar la realidad y sus propios sentimientos.
La envidia es mil veces más terrible que el hambre.
Porque es hambre espiritual.
-Miguel de Unamuno-
Mírate a ti mismo antes de hablar de los demás.
El juicio dañino que surge de la envidia es el resultado de un sentimiento de apatía y infelicidad hacia tu propia vida. La envidia refleja lo que nos falta: el inconformismo y el autorrechazo . Es un sentimiento que habla de insatisfacción y huye de reconocerlo.
No se trata de conformarse o no querer alcanzar el desarrollo personal, sin embargo, una de las mejores técnicas para utilizar la envidia de forma positiva es utilizarla como motivación. Esto es lo que significa hacer los éxitos de los demás
La crítica no es más que un orgullo oculto. Un alma que es sincera consigo misma no critica. La crítica es cáncer del corazón.
-Madre Teresa de Calcuta-
Mirarnos a nosotros mismos antes de hablar de los demás con envidia nos ayuda a entender lo que debemos cambiar o qué deseos tenemos. Deseos que quizás no se habían manifestado hasta ese momento. A partir de esta autoobservación es más fácil orientar nuestras acciones para hacer realidad nuestros sueños, luchando con ilusión y no con odio por conseguirlo.