
¿Por qué generalmente no apreciamos la soledad? ¿Por qué la mayoría de la gente siempre prefiere estar en compañía? Muchos evitan a toda costa estar solo por eso buscan todas las soluciones para estar con otras personas. tienen miedo de estar solo permanecer en silencio consigo mismos y tener una gran necesidad de estar con alguien para no afrontar el peso de la soledad.
En cambio, podemos aprender mucho de la soledad, ella nos enseña y nos lleva a superarla. Aprender a estar solos puede llevarnos más lejos que cualquier otra empresa, sólo hay que saber mirarlo.
La cara más amarga de soledad es ese sentimiento el que nos hace sentir no amados ni apreciados. La soledad impuesta y no elegida no es una de las circunstancias más agradables que podemos vivir pero puede ayudarnos a crecer mucho.
Si te sientes solo no siempre tienes que buscar la compañía de otras personas. A veces, encontrar formas de disfrutar de esta circunstancia puede ayudarte.
Estar solos y escuchar una sola voz, la del diálogo con nosotros mismos
la soledad esta ahi maquina cinceladora de nuestro espíritu. Por tanto, podemos utilizarlo como una herramienta para fortalecer nuestro crecimiento personal. Estar solo significa escuchar sólo la propia voz, ese diálogo interno que la mayoría de las veces nos incomoda y que intentamos silenciar con ruido y compañía. Hemos estado haciendo esto desde que empezamos a ser conscientes. Lo que realmente nos asusta no es la soledad sino lo que tenemos que decirnos unos a otros.
Si te sientes solo es porque estás mal acompañado. No olvides que la soledad es el imperio de la conciencia.

La soledad es para el espíritu lo que es. dieta es para el cuerpo. Si es cierto que es tan silencioso como la luz, también es uno de los agentes más poderosos. Estar solo es intrínseco al ser humano y esencial al hombre. Todos venimos solos al mundo y lo dejamos de la misma manera.
Así que en la soledad sólo encontramos lo que llevamos dentro. Los momentos en los que podemos estar solos son, por tanto, los más propicios para conocernos. Saber escucharse es el mejor remedio contra miedo estar solo.
Debes encontrar en la soledad la calidez de un amigo que te ofrezca la compañía que necesitas.
La primera condición para iniciar un diálogo interno sano es desarrollar la capacidad de comprenderse y valorarse a uno mismo. Escuchar, aceptar y reconocer lo que tenemos que decirnos unos a otros abre la puerta a un lugar acogedor donde sentirnos protegidos.
La soledad es y ha sido siempre la experiencia central e inevitable de todo hombre. El hombre más fuerte del mundo es el que está más solo.
-Tom Wolfe-
Si te sientes solo recuerda que la soledad nunca nos abandona
La soledad nunca nos abandona. Esta frase llena de sarcasmo esconde una verdad que puede resultar muy incómoda. Todos al menos una vez escuchamos abandonado . Nos vimos obligados a abrazar una independencia dolorosa y profunda. La misma independencia que cuando todo nos abandona nos acoge en su refugio.
Nunca encontraremos a nadie que nos haga tanta compañía como la soledad. Porque si lo elegimos libremente podemos utilizarlo para gestionar y ordenar lo que pensamos y sentimos.

Creemos que ser adulto significa ser independiente y no necesitar de nadie. Sin embargo, a veces esta búsqueda de independencia termina haciéndonos daño. Por este motivo todos sentimos en algún momento de nuestra vida que nos morimos de soledad.
Por eso es importante recordar que cuando los momentos en los que nos sentimos solos, indefensos y abandonados son aquellos en los que más necesitamos estar a solas con nosotros mismos. Son los momentos en los que tenemos que abrazarnos fuerte hasta sentir que estamos ahí con nosotros mismos. Ésta es sin duda una de las mayores ironías de la vida.
Es fácil vivir de acuerdo con las opiniones del mundo. También es fácil vivir de acuerdo con nosotros mismos en nuestra soledad. Pero el gran hombre es aquel que, entre la gente, mantiene su independencia de la soledad con perfecta serenidad.
-Emerson-