
El duelo retrasado o congelado se refiere a una pérdida que no ha sido superada . Es un dolor que se cronifica, se arrastra de forma permanente y se manifiesta de diferentes formas: ansiedad, estrés, cansancio, apatía, irritación constante… Por sorprendente que parezca, es una realidad clínica muy frecuente.
Algunas personas no saben manejar el dolor, ese sufrimiento que paraliza y crea un vacío difícil de llenar. Otros se aferran a la vida diaria en el trabajo y a los compromisos convenciéndose de que pueden seguir adelante. Se dicen a sí mismos que todo está bien y que el dolor se puede ocultar; como alguien que asegura un artículo personal.
Ambos grupos de personas comparten la misma anatomía del sufrimiento. : el del dolor patológico en el que no hay cierre ni aceptación de la pérdida. Es bueno entender que el dolor no tiene fecha de caducidad, puede durar décadas y afectar todo lo que piensas y haces. El duelo retrasado se esconde detrás de múltiples enfermedades y nubla la posibilidad de volver a ser feliz.
Llorar hace que el dolor sea menos profundo.
-William Shakespeare-

¿Qué es el duelo retrasado?
El duelo se puede congelar, suspender o incluso atrapar como una semilla en una gota de ámbar. . Sucede cuando nos negamos a afrontar una realidad dolorosa cuando nos decimos a nosotros mismos que es mejor dejarla de lado para retomar nuestra vida sin pensar en el pérdida de un ser querido .
Una situación que los especialistas en duelo conocen muy bien: este proceso psicológico se vive de forma muy diferente según la persona. Pues es opinión común que una pérdida es sinónimo de tristeza y que en promedio se necesita entre un año y un año y medio para superarla y hacer duelo.
Pero estas ideas no son del todo correctas. En primer lugar, cuando se pierde a un ser querido se experimenta un sentimiento que va más allá de la tristeza. Una mezcla de ira, confusión e incluso angustia. Además, la experiencia del duelo está directamente ligada a la personalidad de cada individuo y a los recursos y apoyo social y personal disponibles. en ese momento dado.
Como se explica en estudio realizado por la Dra. Katherine Shear de la Universidad de Columbia en Nueva York Es extremadamente difícil predecir cómo afrontará una persona la pérdida de un ser querido. También se estima que aproximadamente el 5% de la población experimenta tarde o temprano un episodio de duelo retardado. Veamos las características de este proceso a continuación.
Síntomas del duelo retrasado
El duelo retrasado es un mecanismo de defensa . La persona se niega a aceptar lo sucedido, no puede afrontar la realidad, no se siente capaz enfrentar tal sufrimiento . Luego, el cerebro opta por negar o simplemente congelar el sufrimiento dejándolo a un lado.
Pues este esfuerzo psicológico y contención emocional tiene consecuencias:
- Hipersensibilidad. Cualquier acontecimiento inesperado o fortuito se vive de manera sobredimensionada.
- Trastornos de la alimentación o conductas adictivas.
- Aparición de síntomas psicosomáticos como problemas digestivos, alergias, dolores de cabeza, dolores musculares, problemas dermatológicos, caída del cabello.
- Problemas relacionales. Falta de alegría, paciencia, ganas de compartir o disfrutar de momentos de ocio. Relacionarse con los demás de forma no auténtica. Pérdida de empatía por un sufrimiento interno no aceptado que eclipsa todo lo demás.
¿Cómo se trata el duelo retrasado?
Quienes experimentan un duelo retrasado deben saber que con el tiempo toda la carga emocional resurgirá . A veces no hace falta mucho para desencadenar una serie de sensaciones capaces de desbordarse. Allá muerte de una mascota Ser testigo de la enfermedad de un ser querido o incluso de un pequeño accidente puede desencadenar una avalancha de sentimientos difíciles de gestionar.
En el Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales. (DSM-5) las condiciones clínicas del duelo congelado no aparecen como tales. Sin embargo, existen criterios de diagnóstico para el trastorno de duelo persistente complicado. Pues bien, teniendo en cuenta la existencia de este duelo patológico En los últimos años se han desarrollado nuevas terapias que están demostrando ser muy efectivas.
Un ejemplo de esto lo encontramos en estudio de 2012 por la Dra. Julie Wetherell de la Universidad de San Diego en California. Se trata de un enfoque que combina la terapia cognitivo conductual y la terapia interpersonal con técnicas de exposición prolongada. El objetivo básico es fomentar la aceptación de la pérdida trabajando las emociones y otro aspecto que suele estar presente: el sentimiento de culpa.

Conclusiones
Nadie está preparado para afrontar una pérdida. . El duelo no es un proceso universal y mucho menos regulado; puede ser dinámico, rígido, complejo e incluso patológico. pide ayuda (y dejarse ayudar) es de gran utilidad para afrontar esta nueva realidad de forma adecuada y saludable.
 
             
             
             
             
             
             
             
             
						   
						   
						   
						   
						   
						   
						  