Combatir la pereza no es sólo una cuestión de fuerza de voluntad

Combatir la pereza y la apatía no depende sólo de la propia voluntad.

Cuando una persona se sumerge en el pozo de la apatía y la pereza, su realidad cambia por completo. En primer lugar, ya no tiene recursos suficientes para salir de esta situación. No siempre tiene la energía necesaria para recuperar su vitalidad y colocar en su horizonte nuevos y motivadores objetivos con los que recuperar las ganas, el brío o la

Lo opuesto al amor no es el odio

-Leo Buscaglia-

Es preferible comprender qué hay detrás de ese pozo en el que se ha hundido la persona que darle estrategias inmediatas para salir de él. Necesitamos saber qué subyace a la actitud apática, al cansancio y a la carencia. languidez . No es lógico ni útil dotar de recursos a un paciente sin arrojar luz sobre las causas de su padecimiento.

En los últimos años el número de estudios La falta de motivación y la apatía están relacionadas con circuitos cerebrales específicos que en determinados momentos puede provocar determinadas patologías.

Factores a tener en cuenta a la hora de elegir el abordaje terapéutico más adecuado para combatir la pereza.

Las sombras de la desmotivación y el cansancio

Para combatir la pereza y la apatía necesitas algo más que un simple consejo. Cuando estos estados no son precisos y limitados en el tiempo sino que se vuelven crónicos, la persona (y quienes la rodean) deben comprender la importancia de un cambio. Para ello es fundamental contar con un diagnóstico adecuado que te permita implementar pequeñas innovaciones en tu rutina.

Es igualmente importante concienciar a otros para que abandonen las expresiones peyorativas; existe la creencia de que uno es perezoso al querer hacerlo. Debemos evitar catalogar la inactividad o la falta de interés como una debilidad de carácter porque no es útil ni apropiada. Veamos a qué le deben realmente muchos de estos estados.

Factores que determinan la aparición de pereza y apatía

Falta de sentido de autoeficacia.. Muchas veces y por diversas circunstancias la persona deja de confiar en su capacidad para tener éxito y sentirse útil en sus responsabilidades diarias. Una situación de este tipo es devastadora.

Omitido apoyo emocional . Cuando el entorno en el que vivimos no está disponible a nivel emocional o cuando estamos rodeados de frialdad o desinterés, pueden surgir estos estados de apatía y desmotivación.

El miedo... a no intentarlo y a repetir los mismos errores de ayer.

Factores biológicos y/o neurológicos.. Condiciones como la

Cómo combatir la pereza y la apatía

Para combatir la pereza y la apatía necesitamos ayuda especializada y de nuestros seres queridos de quienes debemos percibir un auténtico sentido de comprensión y no de censura. Porque la falta de ganas y entusiasmo motivación nos invade cada vez más si sólo recibimos críticas o desprecios.

Para entender mejor cómo ganar este estado debemos recordar un detalle. Muchas veces creemos que para crear un estado emocional que mejore la motivación basta con cambiar nuestra forma de pensar. La famosa regla de

No si no estamos bien. No si tenemos escasez serotonina o si padecemos alguna enfermedad que afecte a la

El cerebro, la mente y el

Estrategias para recuperar el entusiasmo

• Habiendo descartado factores hormonales u otros problemas orgánicos, debemos entender qué subyace al nuestro. ánimo .

• Estableceremos un período de transición en el que haremos una sola cosa: solucionar nuestros problemas. Pensaremos formas de afrontar esta insatisfacción, este miedo, esta decepción... Estableceremos un proceso de desapego de todo lo que nos bloquea.

Cambios graduales. Empezaremos a introducir pequeños cambios en nuestras rutinas. Por ejemplo, podemos cambiar nuestra alimentación o darnos nuevos horarios. Posteriormente y a medida que implementemos estos pequeños cambios, implementaremos cambios más significativos que puedan aportarnos bienestar y que satisfagan nuestras expectativas de vida.

Dirige tu mirada hacia objetivos concretoshacia cosas que podemos obtener en la vida cotidiana y que nos satisfacen.

Desafiar la apatía. Después de adoptar nuevos rutina

Combatir la pereza y la apatía no es una tarea fácil pero tampoco imposible. Sin embargo, no podemos olvidar que estas sombras son reincidentes y suelen visitarnos con frecuencia.